Tercera parte. Capítulo 2.

 



Hola, aquí os dejo el siguiente capítulo de la tercera parte.  

Al día siguiente me operan de urgencia ya que ¿Qué sería de una historia hospitalaria sin ir al quirófano?  

Anda, la primera vez que me operan de urgencia, ¡¡¡tiene que ser una cosa superurgente para que lo hagan así!!! ... No, es que en vacaciones solo operan de urgencia. 

Lo de siempre, mi padre entra en el quirófano, yo me duermo y se va. 

Después de la operación me duele demasiado la barriga, así que me dan morfina y me duermo. 

En los días siguientes me sigue doliendo demasiado la barriga y me olvido viendo series de Star Wars. 

Vaya, parece que me estoy volviendo a enganchar a esa saga.  Aunque claro, en el hospital, en una habitación después de una operación, o ves series o te aburres. 

Cuando salga del hospital, a este paso me voy a convertir en un jedi. 

Cada día por la mañana me tienen que hacer analíticas, muchas veces son a las 7 de la mañana y me despiertan, y como no es fácil en mi caso encontrar una vena.  A veces me tienen que pinchar muchas veces. 

Después de eso me vuelvo a dormir y una hora después viene el doctor a verme y otra vez me despierto. 

Os voy a decir una cosa, quien duerma sin despertarse en el hospital tiene que ser una persona con mucho sueño. 

En cuanto a las analíticas, a este paso me voy a quedar sin venas. 

La pregunta es: ¿por qué un día me tienen que hacer analíticas y al día siguiente también?

Parece que los médicos piensan que me pinchen me gusta tanto como jugar a la play. 

Os voy a contar una anécdota. 

Un día viene una enfermera a pincharme, y como siempre me despierta. 

Enfermera: Uf, que difícil.  Mejor espero a que venga la experta. 

5 minutos después aparece otra enfermera. 

Papá: ¿Eres la experta?

Enfermera 2: No, y estoy porque lo pinche ella porque es muy difícil.  Adiós. 

Una hora después, cuando el doctor me visita y me despierta.  Por fin aparece la experta. 

Cuando el doctor se va ella me pincha con mucho cariño.  Aunque ya solo le quedan arterias. 

Tendré que hacerles un funeral a mis venas. 

Un día yo estaba durmiendo cuando el doctor aparece y adivinad que hace. 

Exacto, me despierta. 

Doctor: Miguel ¿estás bien?

Yo: Esto. . .  si

Yo en mi cabeza: si no me hubieses despertado estaría mejor. 

Doctor: pues a casa. 

Dos horas después, cuando mi padre había hecho un viaje para llevar cosas. . . 

Doctor: Esto. . .  ¿Os dije que a casa? Era broma, resulta que a Miguel le falta sangre. Esta gente de hoy en día se lo cree todo.

Papá en su cabeza: ¿Y para eso me has hecho conducir? Gracias por darme trabajo. 

Mamá: Si ya lo decía yo que estaba pálido, ¿por qué nadie me hace caso?

¿os cuento una cosa? Yo no me veía para irme a casa ya que me dolía demasiado la barriga y me sentía raro, como que no era yo mismo. 

Esa misma tarde me hicieron una transfusión de sangre. 


 Esta es una de las series que vi.  

Comentarios

  1. Le das la vuelta a todo con mucho humor Miguel!! Lo del funeral a las venas me ha hecho mucha gracia!!

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  2. Uhhh a Lih le pasa lo mismo con sus venas. Siempre tiene que sacarle una experta porque sus venas son muy finitas. Y en cuanto a estar en el hospi y que te despierten tempranito para los análisis también le pasa a Lihuel.

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  3. Miguel me encanta como lo vives y lo cuentas y nos das un golpe de realidad eres genial

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  4. Vaya con el joven Padawan. Seguro que ya tendrás pase VIP en el hospi.
    Sigue con ese ánimo campeón.

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